El pasado día 19 de febrero, en el Senado, tenía lugar todo un acontecimiento para los que amamos la música coral que, si bien no nos va a cambiar la vida, nos produce mucha satisfacción. Se trata de la declaración institucional de reconocimiento de la actividad coral como Bien Cultural de nuestra sociedad.
El senador Montes Jort fue el encargado de leer la declaración en la que se reconocía “el trabajo y la dedicación de todas las agrupaciones corales en sus diferentes facetas que hay en el Estado español” agradeciendo el trabajo de la Asociación Nacional de Directores de Coro. Además, se reconocían los beneficios que, según se desprenden de diversos estudios políticos, aporta el canto coral a la salud:
- Mejora de las funciones respiratorias y cardiacas.
- Desarrollo del control motor del funcionamiento vocal.
- Mejora de diversos aspectos neurológicos debido a la conexión de diferentes áreas funcionales del cerebro, etc.
Además, Jort reconocía que “cantar en grupo es una de las actividades más beneficiosas para el bienestar de las personas ya que afecta positivamente a su salud física, mental y social”.
Y es que, el canto colectivo:
- Reafirmar la autoconfianza.
- Promueve la autoestima.
- Conecta con las emociones de las personas.
- Facilita la inclusión social.
- Apoya el desarrollo de las habilidades sociales.
- Permite a personas de diferentes edades y habilidades reunirse en torno a la experiencia de la creación en el arte.
- Tiene la capacidad de hermanar diferentes pueblos a través de la interpretación de repertorios comunes.
- Facilitar el intercambio y enriquecimiento cultural.
En esta misma línea, declaró que “en España el movimiento coral consiguió desde sus inicios romper múltiples barreras sociales y generar vínculos de transformación y dinamización social, aunando a población de perfiles muy diferentes en torno a eventos culturales en los que su valor intrínseco desde el punto de vista social es innegable”.
Por eso, y teniendo en cuenta que el Canto Coral se ha convertido además en un vehículo de conservación del patrimonio cultural y tradicional, reconocían que es indispensable que cuente con el apoyo necesario para poder desarrollarse con absoluta plenitud. Por eso, la Comisión de Cultura del Senado manifestó su “reconocimiento como Bien Cultural para la mejora de la sociedad, así como para el desarrollo y conservación del patrimonio musical; su reconocimiento a la figura del Director de Coro y de su profesión como elemento indispensable de la actividad coral; su reconocimiento a los beneficios individuales y colectivos de esa actividad coral, una de las actividades artísticas más inclusivas e integradoras que puede practicarse con cualquier edad, animando a practicarla; y llama al apoyo de las iniciativas que persigan su fomento e implantación en los ambientes educativos y organizaciones tanto públicas como privadas, así como las investigaciones en torno a ellas”.
Ahora sólo queda que este reconocimiento se transforme en medidas prácticas que ayuden al fomento y desarrollo de la actividad coral.